Situada en el litoral y en gran parte resultado de un retroceso oceánico, la parroquia de Costa de Caparica ocupa una superficie de 10,74 kilómetros cuadrados, entre el mar y la escarpa. Es la playa continua más larga del país, con unos 30 kilómetros de extensión. El paisaje protegido del Acantilado Fósil de la Costa de Caparica presenta aspectos geológicos y geomorfológicos de gran interés, no sólo desde el punto de vista científico, sino también paisajístico. Las bellas formas de erosión que presenta, sus tonos ocres y sus abundantes barrancos coronados de vegetación, proporcionan un telón de fondo insólito a toda la línea de playas.

Lisboa es una ciudad iluminada. El Tajo y el sol, casi siempre presente, hacen de la capital portuguesa un espejo de color, donde la belleza y singularidad de la arquitectura no pasan desapercibidas. Siempre hay mucho que ver y hacer en Lisboa, lo que abre un mundo de posibilidades para las más variadas experiencias a cada visitante.